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UN IMPRESIONANTE MUSEO DE HAMBURGO

Descubre el aeropuerto en miniatura más grande del mundo

Está en Hamburgo y forma parte del Miniatur Wunderland. En él, aviones despegan y aterrizan de verdad, así como realizan todas las funciones de una terminal de pasajeros.

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Hamburgo es una de las ciudades más fascinantes del mundo en lo que a museos diferentes se refiere. Solo en la ciudad es posible elegir entre más de una decena de museos a cuál más diferente y especial. En ellos, en vez de cuadros o esculturas, podemos ver prototipos de coches, tabletas de chocolate únicas, barcos a escala de todos los ejércitos del planeta e incluso el aeropuerto más grande del mundo en miniatura.

Este récord se encuentra en uno de los lugares más especiales de la segunda ciudad de Alemania: el Miniatur Wunderland, que es una de las nuevas zonas expositivas que ocupan los antiguos muelles del puerto de Hamburgo de principios del siglo XX, una zona que fue bombardeada durante la II Guerra Mundial y que se ha ido recuperando poco a poco hasta convertirse en un distrito dinámico y artístico. No es de extrañar que fuera nombrada Patrimonio de la Humanidad.

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Imagen no disponible | Montaje

Pues allí, junto a otros museos singulares, el de miniaturas cuenta, en sus tres plantas, con todo tipo de escenarios y, sobre todo, muchas maquetas de trenes. Pero es justo otro medio de transporte el que más llama la atención. Se trata de la maqueta de un aeropuerto a escala más grande del mundo, que ocupa casi una cuarta parte de la planta en la que se encuentra del museo y que es imposible abarcar de una vez con la vista.

Con forma de L, en la maqueta encontramos la terminal, la pista de aterrizaje, las pistas de conexión… pero también los aparcamientos para los vehículos de los pasajeros, las zonas de seguridad del aeropuerto, etc. Y, lo mejor, es que en la maqueta todo está en movimiento de forma independiente. Más de un centenar de vehículos y aviones se mueven al mismo tiempo, e incluso se puede ver aterrizar y despegar a los propios aviones, que aparecen y desaparecen ‘mágicamente’ por huecos colocados en las paredes de forma casi imperceptible.

Construir esta impresionante maqueta necesitó de una inversión de 3,5 millones de euros y su construcción llevó 6 años. En total, ocupa una superficie de más de 150 metros cuadrados. Solo en aviones, hay accionados medio centenar (entre ellos el novedoso Airbus A380 de Lufthansa). Entre todos, realizan 360 operaciones de vuelo al día, incluyendo por supuesto despegues y aterrizajes.

La maqueta está inspirada en los planos del aeropuerto de Hamburgo y es imposible no asombrarse ante la misma, más si tenemos en cuenta que el escenario va tornando del día a la noche cada pocos minutos.

El museo tiene bastante éxito, por lo que es importante reservar la entrada previamente en la web del Miniatur Wunderland. La entrada cuesta 15 € y se puede permanecer en las salas una hora, para evitar las aglomeraciones, aunque luego no está del todo controlado. Las mejores horas para ir, al estar más tranquilo, es a partir de las 9 de la noche (abre hasta bastante tarde). ¡No te lo pierdas!

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