Insano, el tobogán acuático donde alcanzas los 105 km/h

Los amantes de la adrenalina ya tienen un nuevo destino que marcar a fuego en su lista de vacaciones futuras. Se trata de la ciudad brasileña de Fortaleza, al norte del país. Allí se encuentra una de esas atracciones que, literalmente, no son aptas para cardiacos, aprensivos ni quienes tengan miedo a las sensaciones fuertes. Se llama Insano y es, nada más y nada menos, que uno de los toboganes acuáticos más altos del mundo.

Se encuentra en el parque acuático Beach Park de la ciudad brasileña y dicen los empleados que no son pocos los que se arrepienten a medio camino de la subida por las escaleras a la torre de madera, imitando un fuerte móvil de los ejércitos romanos, antes de llegar a la base de lanzamiento. Y es que impone saber que estamos a pocos segundos de lanzarnos desde una altura de 51 metros... sabiendo que en cinco segundos nada más ya estaremos de vuelta al suelo, en una piscina de contención.

Claro que, si nos arrepentimos, mucho mejor hacerlo antes de subir del todo, porque para llegar a la plataforma de lanzamiento hay que subir el equivalente a 14 pisos, por lo que ya se descarta a quienes no estén en buena forma para aguantar semejante escalada por escaleras así como así. Desde la cima, de hecho, se aprecia una de las mejores vistas de toda la zona de Fortaleza, así como de la costa del norte de Brasil, así como se respira uno de los aires más puros.

La caída libre que se realiza en el Insano es completamente de locura. Se han medido a bañistas que han llegado a alcanzar los 105 km/h en el descenso, toda una locura. Es todo un récord para este tipo de toboganes, por encima de otros también imponentes como el Spacemaker de Italia (se llega a los 100 km/h) o el Kilimanjaro de Brasil (algo más alto, pero no se superan los 91 km/h).

Insano no es la única atracción radical en el Beach Park de Fortaleza. También encontramos otras como el Kalafrío, en la que una pareja se desliza por una gigantesca U, como la de los skateparks, pero en una colchoneta especial por la que uno de los dos está siempre de espaldas a la propia atracción. Como si fueran barcas, la inclinación de la U es muy cercana a los 90º, por lo que la sensación es impresionante y extrema. Te tiras desde una altura de 11 metros.

Otra es el Arrepius, que cuenta con cinco toboganes simultáneos, cada uno con su propio recorrido y dificultad, para que todo el mundo pueda deslizarse. Eso sí, los más espectaculares empiezan a una altura de 25 metros, lo que da margen a todo tipo de loopings, curvas, caídas, desniveles... al Final, cuando se llega a la piscina de contención, la sensación es de auténtica desorientación. Una diversión bestial.

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Beach Park